El acusado del asesinato de Younes Bilal en Mazarrón en 2021 ha declarado en el juicio que disparó sin intención de matar, alegando que actuó en defensa propia. Según su testimonio, había sido amenazado previamente por varios inmigrantes y temía por su vida.
El acusado, un exmilitar, llevaba un arma cargada el día del incidente. Pasó varias horas bebiendo en un bar antes de ir a su casa y luego regresar al mismo local. Fue entonces cuando se enfrentó a Younes. Asegura que nunca tuvo la intención de matarlo.
Según su testimonio, le dijo a la camarera del bar que “todos los moros que había detrás de la barra” debían salir del local. Varias horas después, Younes llegó al bar y, según el acusado, lo amenazó.
La Fiscalía, por su parte, sostiene que los hechos son constitutivos de un delito de asesinato. Solicita una pena de 23 años de prisión y una prohibición de 10 años para que el acusado resida o visite Mazarrón. La Fiscalía subraya que “lo que pretendía era matar a un moro, en palabras suyas”.
